domingo, 31 de enero de 2010

"...vosotras, las familiares..."


" Vosotras las familiares, inevitables golosas, vosotras moscas vulgares, me evocáis todas las cosas...." ( Antonio Machado, Sevilla 26 de julio 1875- Colliure, Francia, 22 de febrero 1939)
Me para una señora de unos 55 años muy elegante
Ps: Buenas tardes, al aeropuerto, por favor
Tx: Buenas tardes, vamos allá ( un viaje salvador, por fin)

Pero la señora en cuestión no venía sola, veo por el espejo que está a los manotazos limpios, una de esas inevitables moscas se había colado en mi taxi.

Tx: Abrimos las ventanillas y seguro que se va.
Ps: Sí es una buena idea.
Dicho y hecho abro las dos delanteras y la señora hace lo mismo con las traseras; íbamos por Av. Italia a no más de 75 KPH cuando de repente...zasssssss.... se le vuela la peluca con el viento que entraba en el taxi. Freno de golpe, me bajo y corro detrás de la peluca esquivando autos, motos y una cantidad de improperios de todos los que por allí transitaban; entro en el taxi y le doy la peluca a la señora que estaba roja como un tomate. No hablamos más en todo el trayecto.
Al llegar al aeropuerto me paga y se baja de muy mal humor, arranco y no puedo evitar una sonrisa recordando lo que pasó. Subo el volumen de la radio y allí estaba la causante del incidente, posada en el botón del volumen con una sonrisa socarrona.

Ms: No te enojes, "tachero" lo hago para divertirme, mis primas normalmente con el calor se ponen pesadas con la gente, yo prefiero bromas más sutiles.
Tx: Te parece sutil la "hijoputada" que le hiciste a la pobre vieja?
Ms: Y sí, no te olvides que después de comer mierda nos posamos encima de una torta y la gente sigue comiendo; abrí una ventana que me bajo.
Y se bajó no más, en ese momento me asaltó una duda, debería haberle cobrado el viaje ó contratarla para que se quedara conmigo.
Inmerso en ello estaba cuando un señor me para.

Ps: Al Hospital Policial lo más rápido que pueda, me lastimé el oído y mé está supurando, no puedo más del dolor.
Tx: No se preocupe llegamos enseguida.
Bajo el volumen de la radio y allí estaba ella.

Ms: Que tal viejo? perdoname pero la tentación es irresistible.

Tx: Noooooooo!!!!!!!!!!!!! que está supurando el hombre.

Ms: Por eso viejo, por eso bzzzzzzzzzzzzzzzz.

Ps: Como dice joven? con este dolor en el oído no lo escuché.

Tx: Y menos que va a escuchar el pobre.


miércoles, 27 de enero de 2010

Regla de tres simple...muy simple


El presidente electo por los uruguayos ofreció a Diego Maradona que dé una charla sobre drogas ( una vez que finalice el campeonato mundial de fútbol) a la juventud uruguaya; hasta aquí la noticia....¿¿¿¿estamos todos locos?????????????.

Recuerdo a dicho personaje cuando militaba en las filas del F.C. Barcelona haciendo un anuncio para la televisión con el lema "No a las drogas"; protagonizó también un partido de fútbol y en las camisetas se podía leer el mismo lema, por cierto hay una foto memorable ( que encabeza éste post) junto a Julio Alberto ( otro que tal bailaba); por ese entonces se decía que en Barcelona se habían extinguido misteriosamente los "pasos de cebra".


Pepe, seamos serios, dejate de pelotudeces y preocupate por las necesidades urgentes de este país ( que espero no tener que detallarte si no estamos en el horno). Me parece encomiable que quieras que los jóvenes tengan información de primera mano, pero elegiste ( como vos decís) " como el horrrrto"; será que en este país no hay gente cualificada para ejemplarizar?, ó preferís a alguien que les dice a sus compatriotas que la mamen?.

Por esta regla de tres simple si un "señor"mal educado da charlas y/ o conferencias puede llamrse educador, quienes participen serán educandos y el resultado hipocresía y mala educación.

Ahora bien, si eso es lo que querés, Pepe, "vamo arriba" dale no más, pero no cuentes con un servidor, ni para eso ni para ser cómplice de tu falta de educación ( el día que te falte Danilo Astori te quiero ver) ni para tu política "clasista" ( de Av. Italia para abajo también somos uruguayos),hay que formar ciudadanos con igualdad de derechos y OBLIGACIONES.

lunes, 25 de enero de 2010

Q...uique Q....uilmes


Estaba ensimismado en los profundos pensamientos que me caracterizan, intentando descubrir de que manera influye el cambio climático en el crecimiento del Gorgojo de la papa en alta mar cuando un ringgggg!!!!!!!!!!!!... me devolvió a la realidad:

Hola (grgrggrgrgr)


Del otro lado: Que hacés tachero?...



La inconfundible voz de un "Hermano" uruguayo que conocí cuando viví en Bs. As.; un tipo de ley, a la vieja usanza; con códigos y ética.

Nos conocimos en la parrillita donde un servidor "paraba" entre viaje y viaje con el "remis", llevando "porteños" de una punta a otra de esa ciudad sin término medio,que te atrapa o te aleja para siempre.

Las infaltables "Quilmes" cuando caía la tarde y mi auto quedaba estacionado hasta la mañana siguiente, los acordes de la murga repiqueteaban en las paredes de la "cueva" ( como así la denominábamos) primero a regañadientes del dueño ( porteño de San Telmo para más inri), después con su beneplácito y casi con insistencia.


Y: Que hacés Quique!!!!!!!!!!!!!

Q: En Montevideo, vine por el cumpleaños de la vieja.

Y: Dale nos vemos esta noche.


Nos dimos el mismo abrazo de todos los días, no había pasado más de un año, nos habíamos visto ayer, un año o un día; qué más dá cuando sobran seis dedos de una mano para contar a los amigos.


Nos fuimos a una de las típicas parrilladas montevideanas, pedimos chotos en cantidades industriales y cerveza ( ventajas de viajar en el asiento trasero del taxi); nos dieron las tantas de la mañana con la misma cadencia de siempre, con la palabra a flor de piel, con los sentimientos inalterables a pesar de la distancia que hoy nos separa y nos une más que nunca.


Ya de regreso en la puerta de mi casa veo alejarse el taxi que lo lleva junto a su Madre...."hasta mañana Quique... ó hasta febrero como prometiste.... ó hasta cuando volvamos a vernos aunque no haga falta.

Mañana estacionaré el remis en la puerta de la "cueva", en Chivilcoy al 230, y como tenemos por costumbre el primero que llegue pedirá la más fría con dos vasos helados, servirá y esperará por más sed que tenga....una cerveza helada quita la sed, pero compartida con un Hermano es otra cosa, alimenta el espíritu.




viernes, 22 de enero de 2010

El "picadito"


Terminal de Tres cruces, un pasajero lleno de valijas con la amargura de la vuelta en sus pupilas, se acabaron las vacaciones.


Ps. Buenas tardes, Mondragón y Bustamante, ¿ubica?.


Tx: Sí no se preocupe, conozco bien esa zona.


Llegados al destino me paga y se baja cargando lo que queda de sus vacaciones, subo la bandera y cuando estaba dispuesto a arrancar escucho el grito de un chiquilín " cuidado la pelota señor taxista"; lo identifiqué enseguida, era "Rubito" que estaba jugando el "picadito" con el "Piltrafa" el "flaco" Edgardo, "Choni", el "loco" Antonio, el "tato" Gustavo, Quiroga, Hugo, el "Gordo" Walter. La dueña del Salón "Bambi" los miraba desde la puerta mientras el "Tano" de al lado rezongaba por los pelotazos; es una tarde de verano y a estos pibes no los paran ni los treinta y ocho grados que caen sin piedad.

Me bajé del taxi y prendí un cigarrillo mientras los gritos y los golpes de los "Championes" en la de goma retumbaban en cada rincón. "...bo, fué "faul", anda "piltra" no te quejés y sacate los buzos que te vas a morir"; desde un balcón de Mondragón se escucha " cuidado con la camioneta, no me la abollen". Por más que miraba a los gurises me faltaba uno que jugaba de arquero, no recordaba su nombre, uno flaco de rulos que vivía por Ramón Anador, hincha de Peñarol y que iba al estadio además de con la barra, con un pibe de unos ocho años más o menos y que le bancaba los panchos, la Coca-Cola y todo lo que le pidiera, puta, no me puedo acordar del nombre.

Apuro el cigarrillo y subo al taxi, por el parabrisas ya no están los chiquilines jugando, el flaco de rulos prende el auto y se aleja buscando una mano levantada mientras repasa cada instante de su infancia.

Si usted pasa por Bartolo Mondragón, fíjese, aún está lo que queda de la camioneta estacionada en el mismo lugar de hace cuarenta años.