
Me planteo cada jornada laboral desde una óptica absolutamente profesional, pero no puedo con mi "taxi-despistez", soy despistado por naturaleza y les aseguro que mi taxi amarillo y negro se vuelve rojo de la verguenza por "meter la pata" ( estoy doctorado en ésa materia); a continuación les ennumero algunas de las tantas "taxi-boludeces" de quien suscribe éste blog.
1- Un pasajero no vidente sentado a mi lado que conocía perfectamente el recorrido que realizaba a diario me pregunta porqué giro a la derecha.....mi respuesta fué ...no VE que está cortado por un accidente??????.
2- Suben cuatro pasajeros con gesto adusto, me indican como destino una empresa de pompas fúnebres, una vez en el destino el pasajero que viaja adelante me paga y me dice buenas noches...mi respuesta....que pasen bien.
3-Sube una señora con una vestimenta un tanto llamativa, sombrero floreado, camisa a cuadros, pollera verde hasta los tobillos....para romper el hielo le pregunto....¿que tal señora, va a un baile de disfraces???? la respuesta fué contundente.... Señor yo me visto así.
4- Una chica me muestra un papel con el destino, es una clínica especializada en tratamiento para personas con dificultad en el habla; es hora pico y el tránsito es considerable, lo comento con ella y no obtengo respuesta y no hay nada que me moleste más que los pasajeros no me contesten; en voz baja balbuceo.... que gente mal educada....se piensan que somos servilistas...etc.
Llegamos al destino, le digo el importe ella toma un papel y escribe algo, lo dobla y me lo entrega junto con el dinero, se baja y se aleja con un gesto displicente....desdoblo el papel y leo " soy muda pero no sorda, imbécil".
5- En esta profesión uno se lleva muchas sorpresas por eso tengo por costumbre preguntarle a los pasajeros si prefieren algún recorrido en especial...la radio me da un viaje a pocos metros de donde estoy....llego y sale un señor que me entrega un paquete para llevar a 18 de Julio y Cuareim, arranco, acciono el taxímetro y pregunto ¿ algún recorrido en especial????....aún espero la respuesta del paquete posado sobre el asiento del copiloto.
PD: No tengamos "cliches", no seamos rutinarios, adaptémonos a cada pasajero y a cada situación, en definitiva improvisemos y nos ahorraremos que nuestro taxi se sonroje y se ría de nosotros.