miércoles, 14 de octubre de 2009

Gotas de esperanza...


Domingo a las tantas de la madrugada, dejo mi taxi en el garaje y camino dirección a Bulevard Artigas en busca de un amarillo y negro que me arrime a casa, levanto la mano ( me taxi-contagié de mis pasajeros) y me meto de cabeza en un 0Km inmaculado ( ya me gustaría para mí). Le indico el destino y los ojos de quien manejaba parecía que se le saldrían de las órbitas:


Tx: perdoname, pero es el primer viaje que hago en mi vida y no tengo ni idea adónde tengo que llevarte.

Yo: no te preocupes, a todos nos pasó dale no más que yo te indico.

Era un tipo de unos cincuenta años, lo alabé por la prolijidad del taxi y lo que me contestó me devolvió la fé en la gente....


Tx: gracias pero no es mío, es de un amigo que lo compró hace dos meses y el viernes se quebró una pierna; en la barra de amigos somos siete y se lo manejamos un día cada uno, pobre, con el sacrificio que hizo y las cuentas por pagar no lo vamos a dejar tirado.

Me lo dijo con la naturalidad de quién habla de fútbol o del tiempo, con unos valores y códigos que lamentablemente se están perdiendo, el trayecto es corto, llegamos al toque.

Yo: dejame acá no más.....le pagué y me quedé por un momento en la puerta de mi casa viendo como se alejaba ese taxi tan prolijo cuando del cielo empezó a chispear, no era lluvia, eran gotas de esperanza...aún queda gente que vale la pena.

5 comentarios:

Raúl Paulís dijo...

Al final, no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos (Martin Luther King)

Anónimo dijo...

Siempre habrá gente que valga la pena y que nos devolverá la esperanza en la raza humana....

Helena.

ddriver dijo...

Cuando yo empece, trabajaba para uno que eran un grupo de amigos tambien. Y todos tenian la promesa de que cuando alguien se enfermara o se le estropeara el taxi, entre todos se turnarian hasta que todo volviera a la normalidad.
Yo alucinaba de lo buenos amigos que eran y todos explicaban esas condiciones con orgullo.
Ahhh amigo, un dia uno se rompio un brazo, tu viste a los camaradas?? pues el tampoco

Raúl Paulís dijo...

"De todo tiene que haber en la viña del señor", estos no lo pactaron surgió así y todos a una,visca el Barça

Unknown dijo...

Por suerte es mucha más la que vale la pena y nos da fuerzas para levantarnos todos los dias, los cercanos y los desconocidos.